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Desde EEUU no dejan de sorprendernos.El investigador/analista de seguridad Gene Bransfield se levantó un día con una manera divertida de mapear las redes Wifi inseguras de sus vecinos.Como cuenta en el reportaje de Wired,él le puso un collar especial a su gato Coco.El collar tenía una tarjeta Wifi,un módulo GPS una batería y un chip con el sistema operativo Spark OS.Con este dispositivo,puede buscar las señales wifi cercanas al animal y guardar el registro de las redes abiertas o las poco protegidas con sistemas antiguos de encriptación como WEP, los cuales pueden ser hackeados  con facilidad.

Tras confesar que este proyecto no está destinado a ser una herramienta de hackeo seria,Bransfield nos cuenta que "Puse algo de tecnología en un gato y le dejé andar por ahí porque la idea me fascinó.Pero el resultado de la investigación gatuna fue que hay más puntos de acceso wifi y Hot Spots abiertos o encriptados con WEP de los que debería haber en 2014"

Y eso que no ha traído al gato por estos lares,que si no le da algo.